qué pereza afeitarme!!!!! pero hoy toca trabajar y es necesario; podría quejarme: por qué hay que afeitarse para ir a trabajar si a uno no le apetece? pero no lo voy a hacer, porque cuando acepté este trabajo ya sabía que una de las obligaciones que conllevaba era una imagen pulcra: afeitado, limpio y con el uniforme impecable; hubiese bastado decir no, fácil..... cuando se necesita trabajar, no siempre se puede decir no; corrijo: cuando se necesita el dinero que te pagan por trabajar, no siempre se puede decir no; y yo lo necesito.....
afeitarme y cortarme las uñas es lo que más pereza me da de todo; cierto es que, cuando ya lo he hecho, me siento mejor: pero la de vueltas que tengo que dar y la de fuerzas que tengo que reunir para ponerme a ello; al menos, cortarme las uñas, me da la satisfacción de acordarme de un buen amigo que ya no está entre nosotros; mientras estoy cortándomelas siempre me acuerdo cuando en verano, y cuando llevaba chanclas, me decía "a ver si te cortas ya esos mejillones" refiriéndose a las uñas de los pies; la pequeña totó era así y así la queríamos todos (la sumisa totó a partir de las doce de la noche); una pena que nunca llegásemos a poner en marcha nuestro espectáculo, "más allá del overbooking"..... hubiese sido fantástico!!!!! espectáculo musical con "la pequeña totó" y "melbourne mcalahan", nombres ideados por él, yo nunca nos hubiese puesto nombres en inglés; pero él decía que, de esta forma, resultaba todo más internacional; a pesar de todo te sigo queriendo y, espero, que tú lo sepas, estés donde estés.....
ahora tengo que plancharme la camisa y salir corriendo..... qué pereza, plancharme la camisa!!!!!
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